Néstor Maragua

Continúa su proceso creativo cimentado desde hace varios años, cuyo pretexto es la ciudad de Neiva. Tiene en cuenta que los centros urbanos se encuentran formados por la superposición y el acumulamiento de estructuras, redes, espacios, vías, construcciones, los no-lugares y el cúmulo de elementos comunicativos aportados por la señalética. De esta manera, la urbe es considerada como la suma de espacios impersonales y opresivos, donde solo se está de paso, sin vivirlos. Parece decir que la ciudad se encuentra conformada por una serie de receptáculos propicios para asumir el anonimato como una actitud y una forma de vivir, que los convierte en el estado constante de los individuos citadinos. La ciudad, así considerada, es totalmente contraria a las poblaciones de las sociedades que llamamos “tradicionales”, que facilitaban la construcción de identidades, la vivencia de las relaciones sociales y la elaboración de una historia inscrita en un espacio común.

Estos tránsitos del poblado a la ciudad, de lo colectivo a lo individual, de la ubicación a la desubicación permanente, son simbolizados por medio de la superposición continua de planos de color cálido y formatos cuadrangulares, con efectos contrastantes en los niveles cromático y de la superficie, hecha relieve; además, emplea manchas sobrepuestas, trazos y señales geometrizadas, como cruces o equis, extraídas de las marcas que los habitantes dejan sobre los muros, pero que se pueden relacionar con elementos similares, dispuestos en las obras de Antoni Tepíes. En estas construcciones, la figuración humana se encuentra minimizada, hecha silueta, por lo general de color gris. En actitudes pasivas, unas, como si buscaran orientación, y otras trazando peripecias y buscando el equilibrio en planos amplios de color, rutas y grafismos perturbadores. Su trabajo deja resumir la tensión que se produce en la existencia cuando las poblaciones incrementan su desarrollo urbano o cuando los pobladores migran a las grandes ciudades. Por esta razón, el pintor polemiza sobre la calidad de vida y el sentido de pasar de la ciudad tradicional a la ciudad desarrollada.

Acumulaciones (Aproximaciones a la superposición del espacio urbano) independientes:
Pigmentos Industriales sobre MDF
Tríptico 1.85 m. X 2.85 m. C/U
2005

Hoja De Vida


NESTOR EMILIO MARAGUA

Neiva, Huila de 1969.

Estudios
1996. Licenciatura en Artes Visuales, Universidad Surcolombiana, Neiva
1998. Especialización Arte y Folclor, Universidad del Bosque,
2004. Taller Tendencias Curatoriales, 39 Salón Nacional de Artistas, Ministerio de Cultura, Ibagué,

Principales exposiciones
• Rincones Urbanos y Humanos, Cámara de Comercio, Cali.
2000 Pintores Huilenses, Sala Café Borges, Neiva.
2001 Espacios Urbanos II, Auditorio CAM, Neiva.
2001 Espacios Urbanos I, FENALCO, Neiva.
2004 Atajos, Museo de Arte Contemporáneo del Huila MACH, Neiva.

Distinciones
1998 Primer Premio en Pintura, II Salón de Artistas Huilenses, Neiva.
2002 Mención en Pintura, VI Salón de Artistas Huilenses, Neiva.
2003 Mención en Pintura, VII Salón de Artistas Huilenses, Neiva.